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Papá del otro lado del teléfono

Agustín Ramón Serrano Santiesteban

 

Ah, papá, qué bueno que hablamos, anoche  tuve un sueño maravilloso… no, todo está bien, déjame contarte, anoche soñé con mariposas de papel que volaban, sí, eran como mil mariposas de papel de distintos colores… sí papá, claro que era un sueño, no, no… además… papá no me interrumpas, las mariposas entraron por mi ventana… no, yo dejo la ventana cerrada todas las noches pues se cuela el frío y puede hacerme daño… sí,  ellas entraron y la ventana estaba cerrada… no importa, qué tiene que ver la ventana cerrada, las mariposas entraron y ya, ellas saben entrar por las ventanas cerradas y nosotros no, además de hermosas son inteligentes… ah papá, los adultos nunca entienden nada, olvida la ventana, creo que mejor te hubiera dejado un mensaje, pero tenía miedo que no lo recibieras o se borrara, a esa hora no había nadie despierto en mi sueño, las mariposas entraron hicieron tres círculos sobre mi cama y amaneció, sí, como te cuento, amaneció y el sol entró por la ventana… no papá el sol no abrió la ventana, tal vez  lo hicieron las mariposas al salir para que el sol pudiera entrar a despertarme… no, no estoy tomando ningún medicamento, estoy muy bien de salud… tampoco, he dormido bien todos los días… sí, me dejas terminar, bien, amaneció un poco extraño,  en estos días de diciembre el sol se debilita y el cielo se nubla, pero amaneció con un sol muy fuerte, yo creo que amaneció en agosto, sí, y hubiera jurado que hasta había olor a playa… nada de fantasías papá, te decía que el sol entró por mi ventana… Papá… Papá…ah, qué fastidio casi siempre es igual; pero no importa mañana te llamo.

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